Sabemos que existen diferentes tipos de energía, como la energía solar, nuclear o eléctrica. En este artículo nos centraremos en la obtención y aprovechamiento de la energía eléctrica porque es la más utilizada, así veremos los beneficios y riesgos en la naturaleza y sociedad.
Hay centrales eléctricas de combustibles fósiles que queman carbón o petróleo para generar calor, esto se usa para generar vapor para impulsar turbinas que producen la electricidad.
Las centrales de ciclo combinado usa un generador de vapor para aumentar la electricidad producida.
Lo bueno de estas centrales es que son baratas, confiables y generan electricidad por largo periodo de tiempo. Lo malo es que el carbono produce grandes cantidades de dióxido de carbono y esto impulsa el cambio climático.
La electricidad se genera almacenando agua en grandes embalses detrás de las presas. El agua fluye a través de turbinas para generar electricidad.
Al ralentizar el flujo del sistema fluvial se produce un impacto grave en el medioambiente, además, en términos de muerte por accidente, la energía hidroeléctrica es la fuente de energía más mortal.
Se usa el calor producido por la división de átomos para generar vapor e impulsar la turbina.
Las ventajas es que son confiables, funcionan durante mucho tiempo proporcionando electricidad limpia, se generan pocos residuos porque la potencia de un kilogramo de uranio es la misma que produce una tonelada de carbón.
Las desventajas: los accidentes, ahí tenemos Chernobil.
Para generar electricidad eólica se usa la velocidad del viento, para generar la electricidad con paneles solares se usa la luz solar. El problema con esto es que su eficacia depende del clima pues el viento y la luz solar no son constantes.