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Piratas y corsarios en el Golfo de México

A raíz del descubrimiento de América, el golfo de México se convirtió en un escenario importante para la navegación marítima, en él se transportaba las grandes riquezas de las colonias de España, Francia e Inglaterra a sus metrópolis, navegando de un continente a otro. Las primeras naves qué hicieron la travesía fueron carabelas y galeones, muchas de estas naves están hundidas en el fondo del mar en aguas mexicanas.

La piratería en el golfo de México es un fenómeno histórico complejo, duró más de dos siglos y se distinguen dos modalidades: la de acecho y asalto a los barcos y por otro lado la de los asaltos y saqueos a las poblaciones costeras.

Piratas y corsarios en el Golfo de México

El primer gran ciclo de la piratería en el golfo de México se extiende, según López Zea, en el período de 1497 a 1603.  Hay dos etapas, de alrededor de 50 años cada una; la primera dominada por los franceses que comprende el periodo de 1500 a 1550 y la segunda por los ingleses de 1550 a 1600.

El descubrimiento de América y la conquista de la Nueva España revolucionaron a las monarquías europeas en nuevas tecnologías sobre todo en la construcción de sus barcos y armamento pues estos elementos eran muy importantes para la conquista de sus colonias por los grandes dividendos que les generaban, fue así cómo se estableció una ruta marítima a través del Océano Atlántico partiendo del Golfo de México, hacia la costa occidental de Europa.

Los países como Inglaterra, Francia y Holanda contrataron marinos sin escrúpulos para que asaltaran las naves españolas que transportaban las riquezas de la Nueva España a su metrópoli, de esta manera inicia la piratería. El golfo de México resultó un lugar ideal para esta actividad, ya que en él se encuentran varias Islas, por el intenso tránsito de embarcaciones que surcaban esas aguas y sus condiciones geográficas son muy favorables a esta actividad que fue la piratería.

El monopolio comercial que la monarquía española ejerció sobre tierras americanas y las rutas marítimas hacia el nuevo mundo generó, entre los siglos XVI  y XVIII el descontento de otros imperios, cómo el inglés, francés y holandés, que por medio de la piratería buscaban restarle poder a la corona española, asaltando naves españolas y poblaciones costeras de sus colonias, causando terror en mares y puertos, entre ellos el Puerto de Veracruz y la ciudad de Campeche.

¿ Qué es la piratería marina?

Es una práctica de navegación qué consiste en una embarcación privada o amotinada ataca a otra en aguas internacionales. Esta práctica se llevó a cabo en el golfo de México y tuvo su auge posterior a la conquista de Mesoamérica entre los siglos XVII, XVIII y XIX

En este periodo hubo un gran movimiento comercial entre Europa y las colonias del continente americano, que eran transportadas por naves marítimas. La misión de piratas y corsarios era el robo de esas mercancías. Muchos de estos piratas trabajaban por su cuenta, pero otros eran contratados por las monarquías francesa e inglesa, estos dos países se aliaron con el fin de restarle poderío marítimo y económico a España. Los piratas y corsarios trabajaban en secreto en la clandestinidad para estas dos naciones.

La piratería en el golfo de México fue sangrienta y muy peligrosa, los piratas se movían en una línea muy delgada que divide el ser héroe o los peores bandidos, sus naves no eran muy seguras estaban muy expuestas a huracanes y vendavales, no obstante a sus limitaciones eran muy astutos, se movían con mucha rapidez aparecían de repente y con poca advertencia, así lograban sus asaltos a embarcaciones españolas. La flota española se componía por embarcaciones mejor construidas, gracias a ello se defendía de sus ataques y varias veces salía victorioso.

A las embarcaciones de esa época se les denominaba de varias maneras dependiendo de las dimensiones de cada embarcación: carabela, navío, galeón, galeras entre otras. Los barcos piratas eran viejos y enormes, consistían en galeones que confisca van a la armada española, francesa y portuguesa. Aunque hubo muchos casos de expropiaciones de embarcaciones ingleses.

Características de las embarcaciones de esa época

Estás embarcaciones estaban diseñadas para la guerra tenían alrededor de 35 cañones por banda o lado, con municiones de 5.4 Kilogramos de peso. Estos barcos podrían medir entre 38 y 60 metros de eslora (dimensión de un navío tomada a su largo, desde la proa hasta la popa), dependiendo del tonelaje de la embarcación, tenían su palo mayor, depósito de comestibles, una bodega, un castillo de proa, un cuarto para las municiones e incluso un cuarto para prisioneros y sala de cañones. El barco pirata era como cualquier otro barco de esa época.

Galeones o galeras: eran embarcaciones de los siglos XV y XVII, hacia el año de 1720 los piratas ya utilizaban corbetas, eran embarcaciones más veloces y pequeñas con un solo palo. Actualmente la piratería Marina ya casi está desaparecida, quedando algunos reductos en Somalia, Indonesia y Malasia.

Los peligros a los que se enfrentaba un navío cuando se atrevía a navegar solitario en el mar eran innumerables: la principal amenaza eran los barcos piratas y el ataque de corsarios y bucaneros, vendavales, tormentas y vientos huracanados. En un intento desesperado por proteger sus naves de los ataques piratas, España crea en el siglo XVI el sistema de navegación más significativo de la época las llamadas flotas.

Rescate de navíos

Cuando había un naufragio, las autoridades más cercanas de las zonas costeras junto con el capitán del barco hacían tareas de rescate, para ello contrataban barcos pequeños y buzos que auxiliaban en esta tarea, en la mayoría de las veces no se obtenían buenos resultados por lo difícil de las tareas y la corrupción (las autoridades españolas le daban el permiso de rescate al mejor postor) era muy común que los propios marinos del barco accidentado, aprovechando la confusión, ellos mismos se robaban las riquezas que el barco transportaba. Si el accidente ocurrió cerca de una población costera, los lugareños acudían a el lugar del accidente en sus propias embarcaciones, con el fin de obtener un poco de la riqueza transportada (actividad de pillaje), ya sea mercadería, oro o plata.

Piratas y corsarios

Cuando el hombre se dio cuenta de que podía cruzar los mares se hizo navegante. Y cuando a otros hombres se dieron cuenta que podían asaltar a esos navegantes, se volvieron piratas y esto tuvo su auge en el golfo de México en tiempos de la colonia.

Los corsarios tenían la misma actividad que los piratas a diferencia de ellos sí contaba con el apoyo de sus respectivos gobiernos o monarquías, entre ellos se repartían el botín. A los corsarios no les gustaba para nada dar la parte que le correspondía al rey de lo conquistado o robado pues el rey no arriesgaba nada, cómo lo hacían ellos. Por este motivo se hicieron independientes, vendían al mejor postor la mercancía robada.

¿Qué es un pirata marino?

Son ladrones marinos que surcan los mares en busca de algún tesoro con una ruta determinada. Algunos de ellos apoyados por sus gobiernos de origen que tenían la función de robar, asaltar y saquear barcos y poblados.

¿Qué es un corsario?

Nombre que se les daba a los navegantes que, con un permiso qué les daba su gobierno, robaban el tráfico mercante de las embarcaciones enemigas. Los corsarios compartían los usos y costumbres de la piratería, sus ataques se extendían, además del Golfo de México, a todos los mares que rodean al continente americano. El permiso que les concedía sus monarquías, eran a través de una carta de marca o patente de corso, y su misión consistía en capturar y saquear el tráfico mercante de las naciones enemigas de ese gobierno.

Diferencias entre piratas y corsarios

El objetivo era el mismo, robar las riquezas del imperio español, extraídas de sus colonias del nuevo mundo con el fin de restarle poder marítimo y económico a España ya que junto con Portugal se vieron favorecidos por la Iglesia católica mediante el tratado de Tordesillas en el cual se establece una línea demarcación en la que el Papa les delimito los territorios a estas dos monarquías.

Este hecho provocó el enojo y descontento del reino de Inglaterra y Francia, quienes contrataron a navegantes sin escrúpulos para que robaran las embarcaciones españolas, a estos navegantes se les conocía cómo piratas y corsarios. Sus diferencias eran en las formas y lineamientos de asalto y ataque.

Las diferentes formas de piratería son propias del período que comprende, la primera mitad del siglo XVI y la primera mitad del siglo XVIII. En estos 200 años la figura del pirata y corsario se hizo mítica se constituyó en un símbolo de la época exaltado por la novela y las leyendas cómo que hasta el día de hoy dan rienda suelta a la imaginación.

Piratas y corsarios no son sinónimos y es conveniente establecer sus diferencias, ya que son personajes diferentes y con diversas motivaciones. Según el historiador Manvel Lucena el pirata » era el que robaba por cuenta propia en el mar o en zonas costeras, es enemigo del comercio marítimo y lo mueve el afán de lucro, sin discriminar ningún pabellón nacional». Era por lo tanto un hombre que se situaba al margen de la ley.

En su mayoría el pirata era un hombre pobre, miserable, delincuente, vagabundo y desertores o perseguidos por sus ideas y hechos. La piratería no se llegaba por vocación, , era producto de la desigualdad social y pobreza, por lo tanto se llegaba por necesidad.

El corsario era un marino particular contratado y financiado por un estado en guerra, para causar pérdidas al comercio del enemigo y provocar el mayor daño posible en sus posiciones. Aceptaba las leyes y usos de la guerra y ofrecía una fianza como garantía de que respetaría las ordenanzas de sus monarcas.

La actividad del corsario terminaba en el momento de firmar la paz de los países contendientes, aún que muchos de los corsarios continuaban con sus actividades ilícitas en tiempos de supuesta paz.

El pirata y el corsario han sido tradicionalmente retratados cómo malvados, sanguinarios y en muchas ocasiones mutilados, con patas de palo, parches y con un loro al hombro que le avisaba de los peligros que lo acechaban. Las razones son obvias ya que estos personajes transmitían miedo suponían una amenaza a las embarcaciones y ciudades costeras del Golfo de México.

Los corsarios, a diferencia de los piratas, tenían a su disposición embarcaciones de enorme tonelaje, contaban también con embarcaciones ligeras de gran maniobrabilidad con poder ofensivo, gran disciplina a bordo, la consideración a ejercer un comercio libre, qué los españoles consideraron contrabando y una mayor beligerancia anticatolica.

Centro de operaciones de la piratería en el golfo de México

El auge de las colonias, trajo consigo una movilización marítima intensa en lo que fue el Atlántico Norte, con barcos cargados de mercancía y riqueza mineral qué los piratas robaban haciendo de ello un gran negocio y tuvo tanto auge qué piratas y corsarios se vieron en la necesidad de establecer un centro de operaciones en donde pudieran reparar sus naves o embarcaciones y establecer sus estrategias de asalto.

El golfo de México resultó el lugar apropiado por su posición estratégica, el golfo de México contaba con varias Islas cercanas unas de otras y por el tráfico de nave que surcaban esas aguas. Fue en una de esas Islas donde establecieron su centro de operaciones.

Su centro fue la isla de Jamaica, donde vivían ya para aquel entonces algunos piratas y la isla de las tortugas donde vivían mucho más, ahí formaron una república a la que le pusieron por nombre » cofradía» los piratas vivían en aquella isla como ellos querían, sin importarles sus nacionalidades. Ahí no existía nacionalidad, ni policía, ni jueces, ni cárceles. Cuándo se producía un altercado, se retaban a duelo y se batían con espada o cuchillo, al vencedor se le daba la razón.

Los piratas que más asaltaron en el golfo de México  fueron ingleses, pero también hubo franceses y holandeses inclusive portugueses.

Los barcos piratas encontraron en el golfo de México condiciones muy favorables para sus ataques y robos a los barcos españoles y esto era en alta mar, casi al final del viaje, en el golfo de México donde las embarcaciones eran más vulnerables y ellos podrían hacer uso de su fuerza y destreza para robarles.

Poblaciones del golfo de México más amenazadas por los piratas

Los piratas no nada más atracaban y asaltaban los barcos, también lo hacían en las ciudades costeras y puertos, los atracaban con crueldad sin importarles el terror que generaban en la población, asesinaban y maltrataban sin piedad a hombres y mujeres, saqueaban comercios, casas y templos.

Veracruz

Este Puerto vivía en constante amenaza por los corsarios y piratas, con el fin de defender y repeler sus ataques, el Imperio español, construyó el fuerte de San Juan de Ulúa, qué sirvió como la principal fortaleza militar de la Nueva España.

Este fuerte está ubicado en una isla descubierta por Juan de Grijalva en el año de 1518 y construido entre 1535 y 1843, y fue considerado el más seguro y avanzado de su época en el nuevo mundo.

Campeche

Campeche por su posición geográfica dentro de lo que es el golfo de México, fue otras de las ciudades muy expuestas a los ataques de piratas y corsarios y estos ataques fueron muy continuos, llegando a ser una de las ciudades más atacadas y desbastada por los piratas ingleses, franceses y holandeses. Con el fin de defenderse de los diversos ataques, se construyó una muralla, que logró controlar el ataque de los piratas y corsarios

Piratas y corsarios más famosos en el Golfo de México

Francis Drake

Nació en Devanshire Inglaterra, alrededor del año de 1540 y estuvo involucrado en la piratería y el tráfico ilícito de esclavos. Fue nombrado por la Reina Isabel, primer caballero, esta distinción le dio prestigio y llegó a ser tratado como héroe nacional. La Reina Isabel le encomendó una serie de redadas sobre ciudades bajo El dominio español en el golfo de México. Contrajo disentería y murió frente a las costas de Portobelo, Panamá.

 

Johan Hawkins

Junto con su primo Francis Drake, fueron los primeros piratas al servicio de la corona inglesa hombres con mucho carisma y con la fuerza para emprender grandes empresas y servir fielmente a la corona inglesa.

Nació en Plymount,Devon, Inglaterra en el año de 1532 y falleció el 12 de noviembre del año de 1595 en Puerto Rico. Fue un pirata, navegante mercader corsario y comerciantes de esclavos. Para estos dos personajes el oro y la plata traídos del nuevo mundo eran muy atractivos, y podían robarlos, tenía el permiso y el apoyo económico de la Reina Isabel I.

 

Ellos sentían que la corona española obtenía las riquezas del Nuevo Mundo de manera ilícita por la manera tan inhumana que las adquirían. Así con el argumento de qué » ladrón que roba a ladrón tiene cien años de perdón» robaban sin piedad.

El almirante inglés era un criminal para la corona española, no así para la corona inglesa para ellos eran aventureros heroicos y pieza clave para sus fines de colonización. Estos dos piratas mucho tienen que ver con las leyendas que se gestaron en aquella época en la piratería del Golfo de México.

Jean Lafitte

Fue un militar francés, de la guerra anglo estadounidense y corsario que operó en las costas del Golfo de México, tenía varios apodos, el corsario, el bucanero, el Héroe de Nueva Orleans, el Terror del Golfo y el Rey de baratería. Junto con sus hermanos estableció un puerto legal llamado «reino de barateria». En las Ciénegas cercanas a Nueva Orleans, organizaba el comercio del contrabando y el producto del corso efectuado en las costas del Golfo de México. Luchó a favor de la independencia de los Estados Unidos, destacándose en la batalla de Nueva Orleans. Continúo con su vida de pirata hasta su muerte ocurrida en el año de 1823.

 

Jean-David el Olanes

Fue un pirata francés qué se hizo célebre en aguas del Golfo de México y del Caribe y que se caracterizó por su excesiva crueldad. Torturaba de manera despiadada a sus prisioneros y había ocasiones en que les arrancaba el corazón con sus propias manos para luego morderlo con fiereza. Murió en manos de una tribu de indios que conocían sus antecedentes, lo descuartizaron vivo y arrojaron sus pedazos al fuego.

 

Relación de la piratería entre las monarquías españolas e inglesas

Las relaciones entre las monarquías españolas e Inglesas quedaron muy dañadas, debido al rompimiento con las relaciones con la iglesia católica y el divorcio entre Enrique VIII con Catalina de Aragón, estos hechos propiciaron que las dos naciones se enfrascaran en una lucha sin cuartel, tanto en tierra como en el mar, dentro de este contexto se desarrolla la piratería en el Atlántico Norte en especial en lo que es el golfo de México y mar de las Antillas.

Enrique VIII es recordado como uno de los fundadores de la armada real británica, durante su reinado se llevaron a cabo batallas navales y se invirtieron grandes recursos en la construcción de barcos y armamento, en esa época se construyó el barco llamado el Mary Rose (es el único barco de guerra del siglo XVI rescatado del mar).

Fue la Reina Isabel I de Inglaterra la que le dio un orden y una estructura a la actividad marítima, con el fin de poder enfrentar a la Poderosa Armada española, aparte de mejorar sus embarcaciones y armamentos, contrato a grandes marinos sin escrúpulos, llamados piratas y bucaneros, cuyo fin era robarles las riquezas a las embarcaciones españolas, y restarle poderío a este imperio.

Los ingleses exaltaron, junto con las novelas, la literatura y el cine la personalidad de los piratas, convirtiéndolo en un hombre admirable, por tener el atrevimiento y el valor de un guerrero, que navegaba por mares peligrosos, qué por hogar tenía su temible barco con sus cañones preparados para su acción, como bandera una calavera que causaba terror a las embarcaciones españolas y al hombro un loro, qué le recuerda a sus amores y le avisa de los peligros que lo acechan, navegando siempre hasta el final de los tiempos, aún después de muerto, cómo fantasma, todo por alguna maldición.

Lejos de esta fantasía, estos personajes era unan verdadera amenaza sobre todo para los imperios dominantes de aquella época, en especial a las que estaban saqueando al Nuevo Mundo y estos no tenían la intención de compartir el botín. La piratería fue una actividad que acompañó a los hombres desde tiempos antiguos, dedicados al pillaje,a el comercio de lo hurtado y a la guerra como mercenarios.

El ocaso de la piratería

El siglo XVIII marcó el final de esa época. España reconoció la soberanía inglesa y francesa, de sus colonias en Jamaica, Santo Domingo y las que se asentaron en la parte Noreste del continente americano, con esto disminuyó la pugna por el dominio marítimo en el golfo de México y estas dos naciones dejaron de apoyar a corsarios y piratas

Estos ladrones de mar fueron excluidos del apoyo legal y económico, ejerciendo esa actividad por su propia cuenta y riesgo, con el peligro de ser colgados en cualquier momento. El ocaso de su oficio había llegado y el recuerdo de ese pasado mítico, tan sólo quedan algunos vestigios, muros y fuertes en la ciudad de Campeche, así como el Metal de cañones y los galeones que el mar y la tierra se empeñan en ocultar.

GLOSARIO

Carabela: Es una embarcación a vela ligera usada en viajes oceánicos en los siglos XV y XVI por Portugal y España. Es particularmente famoso este tipo de embarcación por ser los barcos empleados por Cristóbal Colón en el viaje del descubrimiento de América.
Corbeta: Un buque de guerra cuyo desplazamiento oscila entre 900 y 2000 toneladas fue muy usado en la primera y segunda guerra mundial
Eslora: Es la longitud del buque,o sea la distancia entre dos planos perpendiculares a la línea de crujía entre la parte más saliente de popa y la más saliente de proa de la embarcación.
Bucanero: Habitantes de la parte occidental de Haití qué se dedicaba a casar vacas y cerdos salvajes para bucanear (ahumar), la carne y venderla.
Filibusteros: Pirata que durante el siglo XVII actuaba en el mar de las Antillas y atacaba a los barcos que comerciaban con las colonias españolas de América.
Galeones: Son embarcaciones a vela utilizados desde principios del siglo XVI, eran barcos de destrucción muy fuerte y grandes, pero tenían un inconveniente eran lentos y se usaba en el comercio y en la guerra.
Flota de indias: Eran las que transportaban las riquezas de los virreinatos españoles en América a la corona de Castilla en Europa. Los productos transportados consistían en plata, oro, gemas, cacao y otras especies.
Navíos: Esta embarcación nació a mediados del siglo XVI como barco de guerra usados por la piratería en el golfo de México y empezó a ser sustituida en la primera mitad del siglo XIX como consecuencia de la introducción del vapor.
Patente de corso: Autorización legal por parte de un gobierno a una persona para hacer una cosa que no está permitida hacer a los demás, dicho de otra manera es la autorización de un gobierno qué le otorga a una persona para hacer El Corso contra los enemigos de la nación. Así nació el corsario.

Fuentes consultadas

Stewart I, (1997) Piratas y corsarios en el Pacífico. [Fecha de consulta 29 de octubre 2018] Disponible en https://www.researchgate.net/publication/235930439_Piratas_y_Corsarios_en_el_Pacifico

Casas, B. (1). Piratas y corsarios en el Golfo de México (siglo XVI). Antropología. Revista Interdisciplinaria Del INAH, (66), 53-69. Recuperado a partir de https://revistas.inah.gob.mx/index.php/antropologia/article/view/4991

Moya V. (s/f) Bandidos de alta mar. Piratas y corsarios en el Golfo de México y el Caribe. [Fecha de consulta 30 de octubre 2018] Disponible en http://www.academia.edu/26540617/Bandidos_de_alta_mar._Piratas_y_corsarios_en_el_Golfo_de_M%C3%A9xico_y_el_Caribe

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