Al leer pasan por nuestros ojos miles y miles de palabras, quizá a primera vista ignoremos estas letras, pero gracias a ellas podemos sumergirnos en todos estos fantásticos y maravillosos mundos. La tipografía es el arte de la impresión, y una buena tipografía puede ser crucial a la hora de que nos interese algo, desde un anuncio publicitario hasta una novela gráfica, la tipografía cuenta con un papel muy importante a la hora de transmitir un mensaje, ya que es el medio entre la idea y el lector. A lo largo de este artículo te mostraré cómo ha evolucionado la tipografía pasando desde la tipografía gotham hasta la famosísima Comic Sans, así que iniciemos este recorrido a través de tinta, papel y luz!
Durante muchos años la impresión de libros no existía, los libros se copiaban a mano, esto significa que se requería mucho tiempo para escribir un libro este trabajo se solía hacer en los monasterios, lugares donde había monjes que dedicaban su vida a transcribir. Creaban verdaderas obras de arte, pero leer era realmente un privilegio reservado únicamente para los ricos y las personas de la iglesia, ya que los principales textos que se difundían eran religiosos. Los cuentos, leyendas y otras historias se transmitían de forma oral, es por eso también que hay muchas interpretaciones diferentes cuentos clásicos, pero eso es un tema para otro día.
Ahora, fue hasta 1440 que se desarrolló en Alemania una técnica en la cual se permitiría elaborar moldes de tipo para imprimir letras individuales, es entonces que se imprime la Biblia de 42 líneas que estuvo vigente por 500 años. Johannes Gutenberg creo y perfeccionó el arte de imprimir y lo propagó a lo largo del mundo, ya que toda Europa tomaría este modelo y se crearía en grandes centros de impresión. Desde aquí comienza a existir la tipografía, ya que los moldes que usaban para escribir las letras que después adoptarían para imprimir las páginas eran tallados a mano, estos primeros símbolos estuvieron inspirados en la caligrafía humanista que se había utilizado hasta ese entonces y fue en Italia que se empezarían a grabar diferentes tipos de símbolos.
A partir de este hecho a impresión fue creciendo y se llevó a todo el mundo, se crearon muchas tipografías que pasarían a la historia tales como la sans serif, creada en 1800 que gracias a su simpleza se impusieron en el mercado al ser más fáciles de imprimir y de leer.
Demos un salto de tiempo, hasta la llegada de la época digital la impresión se siguió dando por estos moldes sólo que ahora de forma electrónica, ya no tenía que ser manual el cambio de letra o la forma de hacerla ya que se hacían con moldes de metal. Esto freno un poco la creación de fuentes nuevas o tipografías en el mundo. Puedes notar esto a leer periódicos o libros de esas épocas, que se limitaban a simplemente mostrarte las letras de la forma más legible y fácil de imprimir.
Fue con la llegada de la tecnología y del siglo 20 que esto cambió, la impresión se volvió digital y crear fuentes estaba al alcance de todos. Lo que tardaba horas en imprimirse ahora sólo tomaba unos cuantos minutos, incluso no había la necesidad de hacerlo ya que lo podías leer en una pantalla, lo que abrió las puertas a muchísimas posibilidades con los nuevos programas de edición. Ahora hay miles de fuentes en internet que puedes encontrar y descargar gratis, una página que quiero recomendarte para esto es https://ilovefont.org/, dónde encontrarás gran cantidad de estas fuentes que se han creado a lo largo de los años.
Tienes en tus manos la capacidad de crear obras de arte tan sólo con un click, gracias a todas estas personas que dedicaron su tiempo y alma a poder permitir que todas las personas disfrutaran del placer de la lectura, ahora que sabes un poco más sobre la tipografía, puedes imaginar cómo fue el proceso para crear esas letras a través de las cuales estás aprendiendo algo nuevo y recuerda que tú al crear, escribir o dibujar también estás haciendo historia.